Los Kolokithokeftedes son unos buñuelos o tortitas de calabacín griegos que básicamente se hacen con esta verdura y alguna especia y se sirven acompañados de aluna salsa aromática y refrescante como una salsa de yogurt o de tahini.
En Grecia se cocinan al horno aunque en otros países se han popularizado fritos para reducir el tiempo de cocinado.
La clave para conseguir una textura consistente y no de «papilla» es dejar reposar un tiempo antes el calabacín y la cebolla con un poquito de sal para que expulsen el agua propia de estas verduras. Así conseguiremos unos buñuelos crujientes por fuera pero muy juegosas por dentro.
Región: Europa – Grecia Servicios: 7 tortitas o buñuelos Dificultad: Media Tiempo: 30 minutos |
Ingredientes
- Un calabacín de unos 220 g
- Una cebolla blanca
- Un chile tailandés verde (opcional)
- Un huevo
- 1,5 cucharaditas de comino en grano
- 1 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de pimienta blanca molida
- Unas 14 hojas de menta
- Unos 4 tallos de perejil con sus hojas
- 3 cucharadas colmadas de maicena
- 2 cucharadas del agua que suelten el calabacín y la cebolla
Para la salsa
- 125 g de yogur sin azúcar o yougurt griego
- 1 cucharada rasa de tahini
- 2 o 3 cucharadas de zumo de limón
- Sal
- Pimienta blanca molida
- 1 cucharadita de AOVE
- 8 hojas de menta o hinojo fresco
Preparación
Pica el calabacín y la cebolla -y el chile, si se quiere- en un robot de cocina o con un rallador. Ponlo en un colador con una cucharadita de sal, mezcla y deja reposar 20-30 minutos.
Prepara la salsa mezclando todos los ingredientes, con las hojas de menta bien picadas. Aliña al gusto y refrigera.
Cuela la verdura con una estameña o una muselina para que suelte todo el agua y reserva dos cucharadas de la misma.
Mezcla la verdura con las especias, el huevo, la menta, el perejil, la maicena y dos cucharadas del agua reservada. Cubre una sartén con aceite a fuego medio: una cucharada bien colmada hará una tortita. Pon sobre un plato con papel de cocina para que absorban el aceite y sirve con la salsa.