El ajoblanco es un plato típico de la cocina española, propio de la región de Almería y muy extendido por toda Andalucía.
Se trata de una crema fría cuyos ingredientes principales son el ajo y las almendras. Es ideal para los calurosos días veraniegos, ya que nos refresca y ayuda a saciar la sed.
Región: Europa – España Servicios: 4 Dificultad: baja Tiempo: 30 minutos |
Ingredientes
- 100 g de almendras crudas
- 2 dientes de ajo
- 1 litro de agua fresca
- 150 gr de miga de pan
- 100 ml de aceite
- 30 ml de vinagre de vino blanco
- Sal
- Para decorar: cebollino y un crujiente de pan (opcional)
- Guarnición: uvas, huevo cocido, manzana… (opcional)
Preparación
Pon a remojo el pan con agua fría para que la miga se ablande, especialmente si se trata de pan duro. Cuando el pan esté reblandecido, quita la costra del pan y reserva la miga.
Para pelar las almendras, escáldalas en agua hirviendo y podrás retirar la piel sin ningún problema.
La forma tradicional de elaborar ajoblanco consiste en machacar en un mortero los ajos y las almendras con un poco de sal.
A continuación se añade el pan remojado y se forma una pasta a la que le vamos añadiendo el aceite para que ligue.
Por último, se le añade el vinagre y el agua bien fresca.
Tips
También podemos elaborar el ajoblanco con la ayuda de la batidora:
Para ello, pon en el vaso de batidora las almendras peladas junto con los dos dientes de ajo y un poco de agua fría de la nevera. Bate bien y a continuación añádele la miga de pan, el aceite, el vinagre y continua batiendo. Finalmente, acaba de poner el agua necesaria y rectificaremos de sal.
Tanto si lo preparas con el mortero y la maza, como si lo haces con la batidora, deberás dejar el ajoblanco enfriar en la nevera.
Presentación
Coloca la creama en un cuendo y añade unas almendras picadas por encima, una chorradita de aceite de oliva virgen extra y decora con un ramillete de cebollino y un crujiente de pan para crear volumen.
Puedes acompañar esta crema con uvas, manzana, huevo cocido, etc.